La entrada del capital privado en la Organización Mundial de la Salud (OMS) por parte de Bill Gates y de empresas transnacionales, sobretodo farmacéuticas, condicionan las políticas de salud y las políticas poblacionales de los países.
De los 1.838 millones de dólares que recibió la OMS en 2015, la mayoría proceden de los Gobiernos de los diferentes países del mundo, entre todos ellos aportaron 1.020 millones. A la cabeza está Estados Unidos con 305 millones, seguido de Reino Unido con 195 millones y Nigeria, que contribuyó con 67 millones.
La OMS también recibió 90 millones de dólares en donaciones de grandes farmacéuticas. Las cuatro farmacéuticas que más contribuyen a financiar la OMS son GlaxoSmithKline, Novartis, Sanofi Pasteur y Merck, que son los principales fabricantes de vacunas.
Aunque en los estatutos de la OMS recoge que el dinero para financiarla ha de provenir de los gobiernos que la componen, ahora son entidades privadas las que están aportado la mayor cantidad del dinero de los fondos de la OMS.
Desde su origen, los 194 estados que pertenecen a la OMS aportan una cuota fija -que se calcula en base al nivel de riqueza y su población-, el problema es que esa aportación obligatoria “se ha reducido desde hace varios años.
Se puede afirmar que «la financiación privada condiciona las decisiones de la OMS», según denuncia el exdirector del Programa Mundial de Medicamentos de la Organización Mundial de la Salud, Germán Velásquez. Este doctor que trabajó más de 20 años en esta agencia de la ONU, lamenta que la Organización Mundial de la Salud «funciona en favor de intereses privados» porque «ha sufrido un proceso de privatización».
¿Por qué se producen estas donaciones?
La respuesta está en la «responsabilidad social corporativa», según reconocen las compañías farmacéuticas. “En el caso de GSK, Novartis y MedImmune” esas aportaciones fueron “principalmente para dar respuesta a la pandemia por gripe”, y en el caso de Merck “la contribución fue para promocionar programas de salud sexual y reproductiva (forma eufemística de decir control poblacional –“reduzcamos la pobreza reduciendo el numero de pobres”).
¿Quién fue el que más donó a la OMS?
Por encima de todos los donantes privados destaca la fundación Bill & Melinda Gates, la organización del creador de Microsoft fue la entidad privada que más aportó a la OMS en 2015, desembolsó 185 millones de dólares. Para que nos hagamos una idea de la magnitud de esa contribución, esta fundación donó 95 veces más que España (nuestro país dio 1.9 millones de dólares en 2015).
¿Estas donaciones condicionan la independencia de la OMS a la hora de tomar decisiones?
Absolutamente. Un ejemplo, el 90% del Programa de Medicamentos ahora está financiado por la Fundación Bill & Melinda Gates, están dando el dinero solo para los asuntos que le interesa a Bill Gates, de tal manera, que el programa solo se centra en los proyectos para los que tiene dinero, el resto se queda sobre el papel. Por ejemplo, ya no se trabaja nada sobre el programa de uso racional de los medicamentos”.
Es que si los fármacos se usasen de manera racional en todo el mundo Big pharma sería Small pharma (y la salud pública ganaría mucho). Hay que saber que las “donaciones” se hacen en concepto de “contribuciones voluntarias especificadas” (los donantes son quienes autorizan qué programas concretos pueden ser financiados con su dinero). La OMS pues hace lo que mandan los que aportan el dinero.
El objetivo de las farmacéuticas al financiar a la OMS es claro pero ¿qué busca Gates con su “filantropía”?
Se supone que dona dinero para la compra de vacunas y que se apliquen en países empobrecidos, en teoría un fin loable. Sin embargo, hay que recordar varias cosas:
– En el momento en que se crea la fundación B&M Gates, Bill estaba acusado en Estados Unidos del fraude más grande de la historia en términos de violación de las leyes sobre la competencia y un juez afirmaba que Microsoft monopoliza los sistema operativos de los ordenadores personales. Su primer objetivo al financiar la OMS (brillantemente logrado) era “lavar” su nombre. No es algo original, hacen así como suelen hacer otras fundaciones creadas por apellidos como Rockefeller, acusados entre otras muchas cosas de destruir el medio ambiente de EE.UU. con la extracción salvaje del petróleo. La Fundación Rockefeller, Save the Children, Unicef y la Organización Mundial de la Salud lanzaron el año pasado el programa Cobertura Universal de la Salud.
– Varios estudios demuestran que debido al sistema fiscal de EE.UU., “dar” dinero puede ser una operación rentable en la medida que se puede deducir de los impuestos la misma. Las fundaciones tiene una fiscalidad muy favorable.
– Cuando Gates da generosamente su dinero a la OMS es él quien, como hemos señalado, fija el destino y la utilización de esos fondos, lo que quiere decir que es el quien reordena las prioridades de una agencia pública. Donde antes había un “problema” para los intereses corporativos, un programa que favorecía el buen uso de los medicamentos, ahora no lo hay (un abuso de los fármacos es un problema de salud pública pero también es algo muy rentable para quienes venden tratamientos).
Los comentarios están cerrados.